PLUMMER NO DEBE RASURARSE...

El mariscal de Denver es más eficiente en su versión con barba

Por LEN PASQUARELLI

BRISTOL (ESPN.com) -- Jake Plummer no debería afeitarse la barba nunca más. Mirando hacia atrás llegamos a la conclusión de que al mariscal de los Denver Broncos quizás debería haberse dejado crecer la barba hace unos años. Le hubiese ayudado a soportar los fríos inviernos en las montañas, y le hubiese ayudado a pasar más desapercibido en las derrotas de los Broncos en las que cometió varias pérdidas de balón.

Pero si sigue jugando con la misma eficiencia que ha mostrado en los primeros seis partidos de esta temporada, Plummer hará de Denver un equipo muy difícil de vencer, y de su barba, aunque más no sea por cábala, algo muy difícil de cortar.

El entrenador en jefe Mike Shanahan, que se había apoyado mayormente en su ataque terrestre y en su sólida defensa, le soltó la rienda a su mariscal esta semana, ante la abatida secundaria de los New England Patriots, y obtuvo muy buenas jugadas a cambio. Plummer, quien sólo había completado un pase de más de 30 yardas hasta el pasado domingo, se conectó con Rod Smith para 72 yardas y con Ashley Lelie para 55 yardas, en la victoria por 28-20 ante los campeones defensores.

Fue un partido de impresionante eficiencia por parte de Plummer, que también recibió ayuda de su corredor Tatum Bell, que corrió para 114 yardas y superó la centena por segunda semana consecutiva.

Plummer no había lanzado para más de 150 yardas en tres juegos consecutivos hace mucho tiempo, y muchos habían comenzado a cuestionar su habilidad para lanzar el balón a lo profundo. Respondió a los críticos el domingo, y lo hizo sin lanzar intercepciones; ya son 17 cuartos sin una pérdida de balón.

Plummer siempre ha sido considerado como uno de esos buenos mariscales que generalmente pierden partidos importantes. Este año, hasta el momento, ha demostrado ser mucho más que eso. Lo cual ayuda a que los Broncos sean una de las más gratas sorpresas de la temporada.