EL MAGO SACO A OTRO CORREDOR DE LA GALERA...
El resurgimiento de Mike Anderson con los Denver Broncos, a los 32 años de edad, es el nuevo hallazgo de Mike Shanahan
DENVER (AP) -- A diferencia de Clinton Portis y Terrell Davis, al corredor de los Denver Broncos, Mike Anderson, no le gusta hacer nada que llame demasiado la atención, tanto dentro como fuera de la cancha.
El veterano de seis campañas, está disfrutando tranquilamente la mejor temporada de su carrera desde que entrara en escena en la NFL como el Novato del Año, en el 2000.
"Estoy haciendo lo que venía haciendo: establecer el juego por tierra, darle ritmo y mantenerlo", dijo Anderson, que es su última presentación acumuló 113 yardas y tres touchdowns, en la victoria ante New York el domingo.
El mejor partido de Anderson en la temporada le permitió a los Broncos vencer a los Jets por 27-0. Denver conservó el balón 25 minutos más que el rival, manteniendo a la defensiva lo suficientemente fresca como para forzar cuatro pérdidas y registrar el primer partido en blanco en ocho años.
"Creo que los afectó la altura", dijo Anderson. "Estaban exhaustos tras los primeros 10 minutos de juego".
Anderson fue la razón principal de la victoria. "Nos agotaron con el juego terrestre", dijo el entrenador de los Jets, Herm Edwards.
Los Broncos acumularon 176 yardas en 19 increíbles minutos en las primeras dos marchas, con Anderson encontrando la forma de sumar 46 yardas en una docena de acarreos y anotando su primer touchdown, para poner en claro las cosas desde el inicio.
"Movimos bien el balón, pero la clave fue el buen comienzo", dijo el mariscal, Jake Plummer. "Consumimos el reloj y terminamos con un TD. Nuestra defensiva estaba muy agradecida".
Anderson fue clave, como también lo había sido en otros encuentros este año.
Luego de lastimarse una costilla en el partido inicial frente a Miami, el corredor ha promediado 4.5 yardas por acarreo.
Sus 782 yardas y ocho touchdowns en la campaña lo ponen en camino a las 1,251 yardas y 13 TDs esta temporada, cerca de las 1,487 yardas y 15 anotaciones que registró hace cinco años, antes de las lesiones, el arribo de Portis y otros pormenores que limitaron sus acarreos.
Anderson pasó a jugar como corredor de poder en el 2002 y 2003, cuando Portis se convirtió en el corredor estrella de los Broncos.
A los 32 años de edad, el resurgimiento de Anderson ha sido una sorpresa para muchos. Casi nadie esperaba que le ganara la titularidad de la posición a Tatum Bell, luego de que el titular del año pasado, Reuben Droughns, fuera intercambiado a Cleveland.
Nadie, excepto el entrenador en jefe, Mike Shanahan.
"Definitivamente tenía muchas expectativas en él", insistió Shanahan. "Un año atrás iba a ser el titular indiscutido; tuvo una pretemporada excelente, pero se lesionó. Me puso contento verlo de vuelta en la temporada baja, y me alegra que esté saludable".
Shanahan dijo que fue testigo de la dedicación de Anderson durante la recuperación del desgarro en la ingle que lo afectó la temporada pasada.
"Fue una larga rehabilitación", agregó Shanahan. "Pero volvió a estar en forma".
El touchdown de 92 yardas, conseguido por Anderson ante Indianapolis en la pretemporada, removió cualquier duda de la cabeza de Shanahan acerca de la recuperación de su versátil corredor.
"Es un corredor muy duro. Engaña con sus movimientos", dijo Shanahan. "Puede romper los tackles y lograr las jugadas más importantes. Así lo hizo en Kansas City este año (con una corrida de 44 yardas), y en la pretemporada con Indianapolis, frente a los titulares. Tiene una gran capacidad de sumar yardas en los momentos claves".
Bell se lastimó el pecho el domingo y podría ver limitado su tiempo en el campo de juego el Día de Acción de Gracias, cuando los Broncos (8-2) visiten a Dallas (7-3). Aunque Ron Dayne probablemente sea activado, Shanahan dijo que no tendría problemas en aumentar los minutos de Anderson.
"Mike es un muchacho que puede acarrear el balón entre 25 y 30 veces, sin inconvenientes. Es un jugador de equipo", afirmó Shanahan.
Y esta temporada podría agregar el premio al Retorno del Año a su currículum.
DENVER (AP) -- A diferencia de Clinton Portis y Terrell Davis, al corredor de los Denver Broncos, Mike Anderson, no le gusta hacer nada que llame demasiado la atención, tanto dentro como fuera de la cancha.
El veterano de seis campañas, está disfrutando tranquilamente la mejor temporada de su carrera desde que entrara en escena en la NFL como el Novato del Año, en el 2000.
"Estoy haciendo lo que venía haciendo: establecer el juego por tierra, darle ritmo y mantenerlo", dijo Anderson, que es su última presentación acumuló 113 yardas y tres touchdowns, en la victoria ante New York el domingo.
El mejor partido de Anderson en la temporada le permitió a los Broncos vencer a los Jets por 27-0. Denver conservó el balón 25 minutos más que el rival, manteniendo a la defensiva lo suficientemente fresca como para forzar cuatro pérdidas y registrar el primer partido en blanco en ocho años.
"Creo que los afectó la altura", dijo Anderson. "Estaban exhaustos tras los primeros 10 minutos de juego".
Anderson fue la razón principal de la victoria. "Nos agotaron con el juego terrestre", dijo el entrenador de los Jets, Herm Edwards.
Los Broncos acumularon 176 yardas en 19 increíbles minutos en las primeras dos marchas, con Anderson encontrando la forma de sumar 46 yardas en una docena de acarreos y anotando su primer touchdown, para poner en claro las cosas desde el inicio.
"Movimos bien el balón, pero la clave fue el buen comienzo", dijo el mariscal, Jake Plummer. "Consumimos el reloj y terminamos con un TD. Nuestra defensiva estaba muy agradecida".
Anderson fue clave, como también lo había sido en otros encuentros este año.
Luego de lastimarse una costilla en el partido inicial frente a Miami, el corredor ha promediado 4.5 yardas por acarreo.
Sus 782 yardas y ocho touchdowns en la campaña lo ponen en camino a las 1,251 yardas y 13 TDs esta temporada, cerca de las 1,487 yardas y 15 anotaciones que registró hace cinco años, antes de las lesiones, el arribo de Portis y otros pormenores que limitaron sus acarreos.
Anderson pasó a jugar como corredor de poder en el 2002 y 2003, cuando Portis se convirtió en el corredor estrella de los Broncos.
A los 32 años de edad, el resurgimiento de Anderson ha sido una sorpresa para muchos. Casi nadie esperaba que le ganara la titularidad de la posición a Tatum Bell, luego de que el titular del año pasado, Reuben Droughns, fuera intercambiado a Cleveland.
Nadie, excepto el entrenador en jefe, Mike Shanahan.
"Definitivamente tenía muchas expectativas en él", insistió Shanahan. "Un año atrás iba a ser el titular indiscutido; tuvo una pretemporada excelente, pero se lesionó. Me puso contento verlo de vuelta en la temporada baja, y me alegra que esté saludable".
Shanahan dijo que fue testigo de la dedicación de Anderson durante la recuperación del desgarro en la ingle que lo afectó la temporada pasada.
"Fue una larga rehabilitación", agregó Shanahan. "Pero volvió a estar en forma".
El touchdown de 92 yardas, conseguido por Anderson ante Indianapolis en la pretemporada, removió cualquier duda de la cabeza de Shanahan acerca de la recuperación de su versátil corredor.
"Es un corredor muy duro. Engaña con sus movimientos", dijo Shanahan. "Puede romper los tackles y lograr las jugadas más importantes. Así lo hizo en Kansas City este año (con una corrida de 44 yardas), y en la pretemporada con Indianapolis, frente a los titulares. Tiene una gran capacidad de sumar yardas en los momentos claves".
Bell se lastimó el pecho el domingo y podría ver limitado su tiempo en el campo de juego el Día de Acción de Gracias, cuando los Broncos (8-2) visiten a Dallas (7-3). Aunque Ron Dayne probablemente sea activado, Shanahan dijo que no tendría problemas en aumentar los minutos de Anderson.
"Mike es un muchacho que puede acarrear el balón entre 25 y 30 veces, sin inconvenientes. Es un jugador de equipo", afirmó Shanahan.
Y esta temporada podría agregar el premio al Retorno del Año a su currículum.
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