UN EMPINADO CAMINO A DENVER...
Por Michael Smith
DENVER, Colorado (ESPN.com) -- Una prueba de que los dioses del fútbol muchas veces tienen un incomprensible sentido del humor es que tanto Javon Walker como Ashley Lelie están en el mismo campo de prácitcas de los Broncos. Están a unos pocos centímetros de distancia, pero con diferentes metas. Walker todavía se está rehabilitando de la rotura de ligamentos cruzados en su rodilla para poder causar un impacto con su nuevo equipo, mientras que Lelie está trabajando con el deseo de no jugar en Denver en el 2006.
Walker estaba en la misma situación que actualmente vive Lelie hasta el primer día del draft, cuando los Green Bay Packers finalmente cambiaron a la ex selección de primera ronda del 2002 por la primera de dos selecciones de segunda ronda de Denver (posición 37° general). Walker dijo que poco tiempo después romperse los ligamentos cruzados en el primer partido de la temporada pasada ante Detroit, decidió que ya no volvería a jugar para los Packers, tal como confirmó en marzo.
Lelie quiere ser el primer receptor de algún equipo y cree que si los Broncos lo intercambian sería lo mejor para ambas partes. Al igual que Walker durante la última primavera en Green Bay, Lelie está amenazando con ausentarse a los entrenamientos hasta que le cumplan su deseo.
Por ahora, según lo dispuso el destino, Walker y Lelie son compañeros de equipo. En un momento, Walker dijo que ambos creyeron que el precio correcto por cada uno sería justamente un intercambio de ambos receptores.
"En el momento que me quería ir de Green Bay, me sentía aliviado porque Lelie podría ser un cambio ideal para los Packers, ya que quizás él se sentiría más cómodo allí", dijo Walker. "A él le hubiese encantado Green Bay. Le hubiesen encantado los fanáticos. No es que haya insultado a la gente de Denver".
"No es que alguien quiere irse de un equipo para estar descontento en otro lado. Ciertos lugares no son para ciertas personas".
Antes de que se concluyera el intercambio durante el primer día del reciente draft, el entrenador de los Broncos, Mike Shanahan, le dijo a Walker que creía que él era la pieza faltante en el rompecabezas del Super Bowl para Denver. Y Walker tiene una gran paz interior ahora, además de buen dinero.
"Me siento aliviado", dijo Walker. "Siento que me saqué un gran peso de los hombros. Estoy contento con la situación, estoy contento de estar en Denver. Espero poder aportar aquí lo que le di a Green Bay".
A Walker no le faltan razones para estar feliz, considerando que ahora tiene la posibilidad de darle ayuda financiera a sus seres queridos, amigos y generaciones de Walkers por venir. Los Broncos y el agente Kennard McGuire están terminando una extensión de cinco años (comenzará regir el próximo año) de un valor de más de 40 millones de dólares que incluye 15 millones de dólares en garantías, más dos bonos, 10 millones de dólares a pagar en el 2007 y otros 5 millones de dólares en el 2008. Walker jugará el último año de su contrato firmado como novato y recibirá un bono por formar parte del plantel de 1 millón de dólares por parte de los Broncos.
Walker ganará cerca de 25 millones de dólares en salario y bonos en los primeros tres años de contrato (2007-09), convirtiéndolo en uno de los WRs mejores pagados de la liga.
¿Merecía Walker el dinero que le pagarán los Broncos?
Nada mal para un receptor que jugó menos de un partido el año pasado y viene de una seria lesión. Y sólo hizo falta una amenaza de no jugar, críticas del futuro mariscal del Salón de la Fama, Brett Favre, una temporada perdida, un cambio de agente (de Drew Rosenhaus a McGuire), una promesa de retirarse en lugar de volver a jugar con los Packers, y finalmente, un tour de dos días y tres ciudades para llegar a este punto.
Los sentimientos de Walker probablemente le dolieron más que la rodilla después de que el mariscal de los Packers Brett Favre lo criticara, prácticamente forzando a Walker a volver al equipo. Aún peor, en la mente de Walker, los comentarios fueron iniciados por la organización, como muestra del tratamiento especial que recibía Favre y que tanto resentía a Walker. Walker dijo que Favre muchas veces entrenaba de forma distinta, que es lo mismo que decir que a veces no entrenaba.
"Quiero decir, ¿quién dirige el equipo?", dijo Walker. "De ser cualquier otro se hubiera dicho algo, pero al ser Brett probablemente no sabían cómo manejar la situación".
El problema con Favre no llevó a Walker a querer alejarse de Green Bay, según dijo el receptor. Walker dijo que tenía más problemas con algunos compañeros que no mencionó, que estaban hablando de su situación y cómo afectaba al equipo. A Walker tampoco le gusta que se hayan tenido que ir tantos veteranos --Darren Sharper, Mike Wahle, Marco Rivera, Mike McKenzie-- o que haya sido relegado a la banca el ala cerrada Bubba Franks para poder recibir sus pagos, mientras que los Packers ni siquiera se querían sentar a hablar acerca de la renegociación del contrato firmado por Walker en el 2002.
Walker dijo que firmó con Rosenhaus debido a su reputación agresiva. Luego lo despidió, porque Walker creyó que su reputación le estaba jugando en su contra.
"Creía que los Packers me iban a dar lo que quería con Drew", dijo. "Luego sentí que estaban siendo duros conmigo sólo porque Drew era mi agente. Incluso durante la temporada me insistían: '¿Cuando vas a despedir a Drew? ¿Cuando vas a despedir a Drew?'"
Walker dijo que no tiene resentimiento para con Favre. De hecho le gustaría tener un jersey número 4 autografiado para colgar en su hogar.
"Si Brett fuese a otro equipo, a otra organización", dijo Walker, "yo podría jugar con él".
En principio, Green Bay no estaba dispuesto a dejar que Walker buscara otro equipo, lo que derivó en una amenaza de retiro.
"Creo que Dios tiene un plan para mí, por lo cual algo eventualmente iba a suceder. En eso estaba confiando", dijo Walker.
Luego, apenas unos días antes del draft, los Packers enviaron a Walker a realizarse exámenes físicos con los posibles equipos interesados New Orleans, Denver y Philadelphia. Los Dolphins y los Chiefs también estaban hablando con Green Bay, pero no pudieron contactarse con el receptor para revisar su rodilla.
Walker está por recibir su título universitario de ciencias sociales de Florida State, y estaba a punto de tomarse un vuelo el jueves a las 10 de la mañana para rendir un examen cuando McGuire le llamó para decirle que no tenía otra opción más que ausentarse a la escuela para tomarse otro vuelo.
En la mañana del 27 de abril, Walker viajó de Tallahassee, Florida, a New Orleans. Arribó a Denver a finales de ese mismo día.
Walker tuvo un desayuno tardío con Shanahan el viernes 28 y el entrenador demostró todo su interés y hasta invitó al receptor a su casa para que conozca a su mujer. Fue emocionante para Walker escuchar que Shanahan tenía planes de colocarlo en el lado opuesto a Rod Smith.
"En mi interior sabía que Denver sería un lugar perfecto para mí", dijo Walker. "Eso es lo que siempre he querido, jugar un partido sabiendo que el equipo está intentando hacerle llegar el balón a Javon Walker".
Si no fuese por el entusiasmo de Shanahan, Walker hubiese volado a New England esa misma tarde. Sin embargo, viajó a Philadelphia y miró las instalaciones de los Eagles. Todo se definió a último momento. Walker estaba en Philadelphia a punto de volar a Boston, para visitar a los Patriots, cuando recibió un par de llamados de unos amigos que le dijeron que lo habían intercambiado a Denver.
Walker sabe lo que le espera. Depende de él probar que una selección de segunda ronda valió la inversión, la igual que los 40 millones de dólares después de apenas una temporada de Pro Bowl (2004).
Walker, quien se rehabilita de 8 a.m. a 4 p.m. todos los días, prometió estar listo para el comienzo del campo de entrenamiento. Esta temporada pretende ser noticia por razones diferentes a las del último año.
"Todas las semanas, cuando levanten el diario", dijo, "van a ver a Javon haciendo algo en Denver".